Charly Bravo y Ana Sáez, por Víctor Coyote
Charly Bravo -exlegionario, caballista, actor de reparto, músico suburbano- era compinche de Carlos Lucas. Éste debió de avisarle de que había unos chalados con los que había hecho una película y que no le hacían ascos a tipos curtidos en todo tipo de cines. Así que se plantó en la oficina en la que estábamos de prestado preparando Matías, juez de línea y le dijimos que sabíamos quién era y que si le apetecía venirse cinco semanas a la Marina lucense y ser uno de los habitantes de nuestro San Amancio. Había que estar allí fijo y sólo se cobraba por jornada en la que se interviniera en la película, pero semanalmente llegaba el pagador de Madrid con las dietas. Con nosotros todo se resolvió con un apretón de manos, como a él le gustaba, aunque imaginamos que luego pasaría por la productora y firmaría un contrato.